La verdad que a día 28 de enero, con el billete de regreso a Europa para principios de febrero, con maravillosa gente que tanto en Dublín como en Madrid me esperan con una sonrisa en la cara y los brazos abiertos, no me siento para nada frustrado por tener que volverme a mitad de camino, ya que ha sido tan alucinante el viaje que hemos hecho que... me doy por satisfecho, porque alargarlo mas? cuando ha llegado a su clímax? porque seguir cabalgando la ola cuando esta rompiendo? no es mejor cerrarla con estilo y no intentar forzar mas la situación... (tengo que aprender a surfear)
Siempre he dicho que debes seguir adelante a pesar de las adversidades, pero... también hay que saber pararse y retomar fuerzas, antes de que la mierda se convierta en un recuerdo.
Tampoco es que me hubiera importado enganchar esta aventura por América del norte (hablando demográficamente, Canada, EEUU y México) con otra aventura totalmente distinta en Sudamérica.
Puede que en el futuro sea algo positivo de lo que aprender y saber cambiar de mundo tan solo con un billete de avión, (después de lo vivido), pero por ahora mezclar “churras” con “merinas”, es como ponerte hasta el culo de C. y después fumarte un mein... no tiene sentido el haber estado en sitios como Las vegas, New York, Acapulco... y dejar todo, incluido el 90% de tu equipaje y meterte a viajar por las fabelas, por los barrios chungos de bogota y subir al Machupichu, es mejor (al menos en este momento de mi vida en el que estoy) volver a Europa, tomar fuerzas y más ganas de viajar e intentarlo directamente desde Guatemala, con otra mentalidad, otro estilo y otra situación.
Ya que si continuo, es para un mes o dos, sin hablar del debito en el que me meto, sino que tampoco voy a ver las cosas que quiero ver, porque Sudamérica (si puedo) me lo quiero gozar todo o la mayor parte, como he hecho con el norte del continente.
Un pequeño “taste” de Sudamérica no me supondría tanto placer, como si me lo cepillo de verdad.
A lo mejor si Rudy hubiera colaborado como debía, cuando debía, habríamos continuado por una vida, pero no lo hizo y nosotros apostamos a una carta que no era 100% ganadora.
Sin olvidar que, a pesar de lo que hemos arriesgado para jugar la carta que hemos jugado y los beneficios que hemos tenido y lo que hemos disfrutado en New York durante estos días, es realmente algo por lo que merece la pena dar gracias y siempre agradecer a Dios, por la suerte que tenemos, por la vida que llevamos, por la gente que nos quiere y por la que queremos y sobre todo.... porque terminamos este viaje sanos y salvos.
Seguimos libres, sanos, con una experiencia de la vida ganada, con cosas sobre nosotros mismos y de los que nos rodean, cosas que malas que desconocíamos, y amistades que se forjan.
Que mejor que la sabiduría y a la ignorancia
Copyright: “Diario de una Malibu” By Victor Herranz 28/01/08
Siempre he dicho que debes seguir adelante a pesar de las adversidades, pero... también hay que saber pararse y retomar fuerzas, antes de que la mierda se convierta en un recuerdo.
Tampoco es que me hubiera importado enganchar esta aventura por América del norte (hablando demográficamente, Canada, EEUU y México) con otra aventura totalmente distinta en Sudamérica.
Puede que en el futuro sea algo positivo de lo que aprender y saber cambiar de mundo tan solo con un billete de avión, (después de lo vivido), pero por ahora mezclar “churras” con “merinas”, es como ponerte hasta el culo de C. y después fumarte un mein... no tiene sentido el haber estado en sitios como Las vegas, New York, Acapulco... y dejar todo, incluido el 90% de tu equipaje y meterte a viajar por las fabelas, por los barrios chungos de bogota y subir al Machupichu, es mejor (al menos en este momento de mi vida en el que estoy) volver a Europa, tomar fuerzas y más ganas de viajar e intentarlo directamente desde Guatemala, con otra mentalidad, otro estilo y otra situación.
Ya que si continuo, es para un mes o dos, sin hablar del debito en el que me meto, sino que tampoco voy a ver las cosas que quiero ver, porque Sudamérica (si puedo) me lo quiero gozar todo o la mayor parte, como he hecho con el norte del continente.
Un pequeño “taste” de Sudamérica no me supondría tanto placer, como si me lo cepillo de verdad.
A lo mejor si Rudy hubiera colaborado como debía, cuando debía, habríamos continuado por una vida, pero no lo hizo y nosotros apostamos a una carta que no era 100% ganadora.
Sin olvidar que, a pesar de lo que hemos arriesgado para jugar la carta que hemos jugado y los beneficios que hemos tenido y lo que hemos disfrutado en New York durante estos días, es realmente algo por lo que merece la pena dar gracias y siempre agradecer a Dios, por la suerte que tenemos, por la vida que llevamos, por la gente que nos quiere y por la que queremos y sobre todo.... porque terminamos este viaje sanos y salvos.
Seguimos libres, sanos, con una experiencia de la vida ganada, con cosas sobre nosotros mismos y de los que nos rodean, cosas que malas que desconocíamos, y amistades que se forjan.
Que mejor que la sabiduría y a la ignorancia
Copyright: “Diario de una Malibu” By Victor Herranz 28/01/08